Hilde Jenssen, responsable de Fundamental Equities en Nordea Asset Management (NAM), habla sobre la descarbonización mundial y sobre cómo las actividades a nivel de cartera pueden marcar la diferencia.
¿Podría describir el escenario y explicarnos por qué es tan importante la descarbonización?
Estoy seguro de que la mayoría de los inversores reconocen que el cambio climático es una crisis mundial y que no solo amenaza al medioambiente, sino también al futuro de nuestra sociedad y economía. Como las emisiones de carbono son un factor clave del cambio climático, conseguir cero emisiones netas de carbono pondría fin a los daños que infligimos actualmente al planeta. Por eso los gobiernos y los propietarios de activos siguen firmando objetivos de cero emisiones netas y trazando los pasos para la descarbonización. Los inversores también comprenden la gravedad de la situación, motivo por el que unimos fuerzas con una serie de compañeros, gestores de activos, para lanzar la iniciativa Net Zero Asset Managers (NZAM).
¿Nos podría contar algo más sobre esta iniciativa y cómo NAM prevé alcanzar cero emisiones netas?
Por supuesto. NZAM, lanzada por NAM y otros 29 gestores de activos en 2020, cuenta en la actualidad con más de 301 signatarios, que representan casi 59 billones de USD1 de activos gestionados. En pocas palabras, todos los signatarios de NZAM están estableciendo objetivos de descarbonización coherentes para llegar a cero emisiones netas en 2050, con revisiones constantes a lo largo del camino. Por lo que se refiere a NAM, nuestras medidas para reducir las emisiones dentro de nuestras carteras son bastante sencillas. En definitiva, no creemos que podamos alcanzar cero emisiones netas solamente evitando excluyendo a determinadas empresas. Si bien desinvertiremos en valores que no apoyan este objetivo e invertiremos en proveedores de soluciones climáticas, la implicación con las empresas es una parte fundamental de nuestro proceso, ya que desempeñan un papel clave para reducir las emisiones de carbono.
¿Cómo resumiría sus esfuerzos de descarbonización a nivel de cartera?
Tomemos como ejemplo la estrategia Global Stars Equity de Nordea, una de las estrategias ESG STARS de NAM. Como cabría esperar, nuestra gama ESG STARS suele evitar las industrias con elevadas emisiones, como las del petróleo y el gas. Al evitar estos sectores, las emisiones generales del fondo lógicamente son inferiores a las de su índice (ACWI) de referencia, el MSCI All Country World. A finales de 2021, por ejemplo, la intensidad media ponderada de carbono del Nordea 1 – Global Stars Equity Fund era un 30 % menos que la del MSCI ACWI Index (Net Return). Sin embargo, al mirar cada sector en el que invertimos, no es raro que nuestra selección de acciones tenga un nivel de emisiones superior al del sector.
¿Pero esto no va en contra del objetivo de cero emisiones netas que ha mencionado antes?
En realidad no. Recordemos que el nivel general de emisiones de la cartera es considerablemente inferior al del índice de referencia, así que los inversores de esta estrategia todavía marcan una diferencia positiva en comparación con los que compran un producto indexado. Aunque hay casos en los que nuestra selección de acciones presenta emisiones elevadas en relación con un sector particular, esto se encuentra perfectamente alineado con nuestro deseo de generar cambios. Lo que no queremos es ofrecer a los inversores una cartera con menos emisiones de carbono, evitando todas las empresas con altas emisiones. Claro, esta sería una manera fácil de conseguir una baja huella de carbono, pero no marcaría ninguna diferencia en el mundo real e, indudablemente, no llevaría al planeta hacia la neutralidad climática. Nuestra filosofía es clara: queremos implicarnos con los grandes emisores para conseguir un verdadero cambio. Por ejemplo, tan solo 4 de las 74 empresas de la estrategia de Global Stars Equity de Nordea suman aproximadamente el 70 % del total de las emisiones de la cartera. Si pudiéramos animar a estas empresas a reducir a la mitad sus emisiones de CO2, la huella de carbono de la cartera se reduciría en un 35 %.
¿Podría citar alguna empresa de la estrategia de renta variable Global Stars Equity de Nordea que haya hecho grandes progresos en este sentido?
Por supuesto. Un gran ejemplo es Waste Management Inc, una empresa estadounidense que brinda servicios de recolección, eliminación y reciclaje de desechos. Los servicios de residuos suelen conllevar emisiones altas. Por eso, la compañía se ha comprometido a linitar el calentamiento global a 1,5ºC mediante la reducción de las emisiones absolutas de gases de efecto invernadero hasta en un 42 % para 2032 en comparación con 2021. También hemos visto que la empresa ha presentado sus ambiciones y objetivos a la Iniciativa de objetivos basada en la ciencia y está esperando su validación. Además, el grupo está impulsando su inversión en instalaciones de reciclaje con alrededor de USD 825 millones en generación de energía baja en carbono, así como USD 800 millones en infraestructura de reciclaje para 2025.2
Esta inversión no solo aumentará su capacidad de reciclaje, lo que será positivo para el medioambiente, sino que incluso reducirá todavía más sus propias emisiones. Asimismo, disminuirá sus costes, de forma que se experimentará una mejora tanto desde el punto de vista medioambiental como financiero. Cuando los grandes emisores actuales hacen este tipo de reducciones, las emisiones generales de la cartera bajan, acercándonos a nosotros y a nuestros inversores al objetivo de cero emisiones.
Por último, con los próximos cambios en la MiFID II3, ¿serán adecuadas las soluciones ESG STARS de Nordea AM para las carteras sostenibles?
Sí, por supuesto. A partir del 2 de agosto, los distribuidores y asesores deberán pedir a sus clientes sus preferencias de sostenibilidad y garantizar que los productos que les ofrecen se ajustan a ellas, así como a sus objetivos financieros y su tolerancia al riesgo. Todas las soluciones ESG STARS de Nordea AM se clasifican como productos Artículo 8, es decir, se comprometen con un porcentaje de Inversiones Sostenibles y a la vez consideran indicadores PAI (Impactos Adversos Principales). Por lo tanto, nuestra gama ESG STARS será adecuada para los clientes con preferencias de sostenibilidad, ya que abarca varias regiones del mundo, así como una amplia gama de clases de activos (renta variable, deuda soberana, corporativa y bonos de alto rendimiento). Estas soluciones se pueden seleccionar individualmente o combinadas para crear cualquier tipo de cartera apta según la normativa MiFID que el cliente necesite.